INVIERNO EN EL FIN DEL MUNDO
Es el momento ideal para sumergirse en la magia del invierno y descubrir paisajes cubiertos de nieve en el extremo más austral del planeta. Los días son cortos, con amaneceres tardíos y atardeceres tempranos que tiñen el cielo de tonos intensos, creando una atmósfera única. Las temperaturas son frías y la frecuente caída de nieve que transforma todo en un escenario blanco y silencioso. Las condiciones pueden cambiar rápidamente, por lo que llevar ropa térmica y vestirse en capas es fundamental para mantenerse abrigado y disfrutar plenamente de las actividades invernales, como el esquí, las caminatas con raquetas y los paseos en trineo. Es la temporada perfecta para vivir la experiencia polar en el ‘fin del mundo’.